El Plan Estratégico de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) contempla como uno de sus objetivos el garantizar la igualdad y no discriminación por razón de género.
Cumpliendo con el objetivo quinto del Plan Estratégico de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social 2020-2023, la ITSS está llevando a cabo una campaña en materia de planes de igualdad, registro salarial y auditoría retributiva, por la que está realizando controles en los planes, medidas de igualdad y discriminación retributiva, prestando especial atención al registro salarial.
Además, esta campaña se complementa con actuaciones en materia de acoso sexual y acoso por razón de sexo, centrándose especialmente en la planificación que se ha llevado a cabo por la empresa para prevenir y erradicar dichas situaciones.
La norma establece que las empresas deben contribuir a garantizar la efectividad de la igualdad de trato y oportunidades. En concreto, en el año 2021 entraron en vigor medidas en esta materia que ya deberían estar implementadas actualmente en las empresas, tales como:
- Planes de Igualdad: Obligatorios para las empresas que cuenten con 50 o más personas trabajadoras, que deberán incluir una auditoría retributiva. Estos planes deberán ser elaborados con la parte social y registrados, recogiendo un conjunto de medidas adoptadas tras la realización de un diagnóstico de situación, un sistema de seguimiento y una evaluación de los objetivos fijados. Para las empresas con menos de 50 personas trabajadoras, estos planes son voluntarios.
- Registro retributivo: Es de carácter anual y obligatorio para todas las empresas, con independencia del número de personas que componen la plantilla, incluido el personal directivo y los altos cargos. En dicho registro la empresa deberá recoger los valores medios de los salarios, los complementos salariales y las percepciones extrasalariales de la plantilla desagregada por sexo.
- Protocolo de acoso sexual y por razón de sexo: También es obligatorio con independencia del número de personas de la plantilla. Las empresas están obligadas a promover condiciones de trabajo que eviten el acoso sexual o por razón de sexo, arbitrar procedimientos específicos para la prevención, y establecer el cauce para las denuncias y reclamaciones que se puedan formular en este sentido. A tal fin, los protocolos son las herramientas más adecuadas para ello, sin olvidar la información, formación y sensibilización que se deben trasladar a las plantillas.
Contra aquellas empresas que, teniendo la obligación de contar con el Plan de Igualdad, no lo tuvieran, el ITSS levantará acta de infracción en materia de relaciones laborales de carácter grave, con multa, en su grado mínimo, de 751 a 1.500 euros; en su grado medio de 1.501 a 3.750 euros; y en su grado máximo de 3.751 a 7.500 euros, además de requerir en un plazo determinado la presentación del Plan de Igualdad.
Y a aquéllas que cuenten con Plan de Igualdad, el ITSS les solicitará el plan vigente y su registro, las actas de constitución de la Comisión Negociadora, así como las de la negociación y aprobación, y la auditoría salarial.
Es habitual que, una vez acordado y registrado un Plan, las empresas den por finalizado el procedimiento hasta la negociación del próximo, con vigencia habitual de cuatro años.
Pero es importante reseñar que disponer del Plan de igualdad no es suficiente.
La ITSS requerirá también el estado del seguimiento, el cumplimiento y la evaluación de las medidas implementadas en el mismo. Además, la empresa deberá acreditar y presentar la constitución y reglamento de funcionamiento de la Comisión de Seguimiento, así como el calendario de las reuniones acordadas, y, en su caso, los informes que acrediten el grado de cumplimiento y eficacia de las medidas adoptadas.
Dentro del marco de actuación solicitará, en ambos casos, el registro retributivo y el protocolo de actuación frente al acoso sexual o por razón de sexo.
